Colombia: ¿Qué llevó a la crisis a los restaurantes Don Jediondo ?
Una de las noticias más importantes de comienzo de año en la industria del retail en Colombia, ha sido la aceptación por parte de la Superintendencia de Sociedades del proceso de reorganización empresarial a la cadena de restaurantes Don Jediondo Sopitas y Pariilla S.A.S con más de 10 años en el mercado y propiedad del humorista Pedro González, más conocido como «Don Jediondo”.
Esta compañía acumuló obligaciones vencidas de más de 90 días que ascienden a $8.679 millones los cuales representan el 39 % del pasivo total de la compañía.
Dentro de las obligaciones fijadas por la Supersociedades está el cierre de 7 puntos de ventas a nivel nacional en los que se destacan Plaza de las Américas, Tunal, Galerías, Gran Plaza Soacha, Bocagrande en Cartagena y Arrecife en Santa Marta, así como la disminución del 10% de la nómina de colaboradores.
Mall & Retail, ha querido analizar los errores por los cuales la empresa Don Jediondo, llegó a la situación de restructuración.
Error No.1 Cocinero a tu Cocina.
Muchos reconocidos personajes de la farándula nacional son picados por el bicho del emprenderismo, algunos creen que buena parte del camino al éxito está asegurado gracias a que sus nombres son una marca.
Y si bien puede ser cierto, no necesariamente es algo negativo y se pueden convertir en una ventaja competitiva que no les puede hacer perder de vista, que el mundo de los negocios es complejo y que hay que comprenderlo para no tener dolores de cabeza.
Dicho de otra forma, cualquier persona que tenga visibilidad y reconocimiento puede emprender un negocio, sin embargo es necesarios que evalúen si tienen la capacidad para afrontar el día a día del negocio.
Una persona puede desarrollar una iniciativa empresarial que agregue valor al mercado, pero la clave es como hacerlo. Habría dos opciones. Una, es conseguir socios que ofrezcan recursos y tiempo o que aporten conocimiento del negocio, de manera que el famoso aporte su nombre como marca. La otra alternativa es la de conseguir un ejecutivo en jefe que se encargue del día a día del negocio.
Error No.2 Crecimiento desmedido.
La empresa cometió la osadía de crecer muy rápido, sin suficiente musculo financiero. En menos de 15 años, abrió cerca de 60 puntos a consecuencia de la explosión de centros comerciales que en la última década sumó 113 proyectos. Para la experta en expansión Silvia Quintero Rubianogroot, “El auge o boom de los ciclos económico, impulsan a las empresas a planes agresivos que pueden llegar incluso a apostarle a un crecimiento de más del 25% en la cantidad de puntos de venta en el término de un año. Pero esto, dependerá mucho el músculo financiero con el que se cuente, pues no se puede desconocer que el retorno de la inversión puede tomar algunos años”.
Error No. 3 Don Jediondo se expandió en tiempos de recesión.
La economía colombiana tuvo crecimiento en los primeros años de la década pasada superiores al 5%, lo cual motivo a muchas marcas de restaurantes a expandirse rápidamente, sin embargo, el sector fue impactado negativamente por la contracción de la economía del último quinquenio, lo cual determinó que muchos puntos no fueran rentables, obligando al cierre definitivo de muchos de ellos.
Error No. 4 No adaptarse al cambio en régimen tributario del sector.
A Don Jediondo Sopitas y Parilla, su situación financiera también estuvo afectado por los cambios en la política tributaria del país que afecto en especial al sector de los restaurantes. Este gremio, pasó del Impuesto a las ventas (IVA) al impuesto al consumo del 8% a partir de 2012, lo cual determino sobrecostos en la operación al no poder descontar dicho impuesto. Así mismo, el aumento de tres puntos del IVA a partir de 2018 significo pérdida de competitividad, por los sobre costos en algunos bienes y servicios esenciales para el sector.
Error No. 5 No entender la complejidad operativa del negocio
Los restaurantes en nuestro país, son negocios con muchas aristas y por ello así como se abren algunos, otros se cierran porque si bien en la apertura de un negocio hay mucha planeación y se apela a una buena estructura de costos y contabilidad, en ocasiones los excesos de liquidez (vender de contado y pagar a crédito ), hace que por emoción sean abiertos puntos de venta sin mucho estudio de costos reales, en donde se omite el rubro de arriendos, hoy fuertemente castigado con el IVA y se dejan pasar otros aspectos que conllevan al cierre de estos establecimientos de comercio y servicio de comidas. Así mismo, el sector tiene costos ocultos que impactan negativamente, en especial las mermas de materias primas.
Error No. 6 Oferta de valor nacional para gustos regionales.
Colombia es un país de contrastes y subregiones. Es el país del sancocho y de las hamburguesas extranjeras, del pescador de Barú o del salsero de Juanchaco. Eso determina que sus gustos gastronómicos sean muy amplios y diversos. De acuerdo al Estudio de Percepción de Oferta Gastronómica de Centros Comerciales, realizado por Mall & Retail, la categoría “Comida Criolla” es muy atomizada y no tiene un líder consolidado, lo cual determina que existan jugadores locales, que ofrecen una variedad adaptada a los paladares de las diferentes regiones. Casos como la Gran Parilla Boyacense, Doña Elvira, Mondongos en Medellín, la Cocina de Socorro de Cartagena, por mencionar algunos, son ejemplos de unos muy buenos conceptos que son exitosos. El poder cubrir una oferta nacional con gustos regionales no es una tarea fácil, ya que implica un portafolio de platos muy amplios, unos inventarios de materias primas costosos que en muchos casos por la diversidad de gustos, no aseguran una buena rotación de platos en los restaurantes.
Error No.8 Altos costos inmobiliarios
Sin duda, uno de los aspectos que más están afectando el desempeño operativo de las marcas de retail son los costos inmobiliarios. En la industria de centros comerciales existe un indicador que mide la salud financiera de los contratos de arriendo, como lo es el índice de costos locatarios. Este indicador mide el costo en que incurren los locatarios para tener disponible el espacio inmobiliario que arriendan, en relación a sus ventas. En este sentido se afirma según los expertos en categorías como restaurantes este valor no debe sobrepasar el 10% de las ventas. Para Don Jediondo Sopitas y Parillas, por el proceso de expansión que vivió y el boom de los centros comerciales de la década pasada, estos costos sobrepasaron los indicadores mínimos, trayendo como consecuencia déficit en la operación del negocio.
Error No. 9 Don Jediondo, soporto su crecimiento con deuda
Cuando un retail depende de los préstamos bancarios para financiar su crecimiento, se vuelven muy susceptible a las desaceleraciones económicas. Cualquier variación del entorno económico afecta su estado de resultados. En efecto, Don Jediondo en su proceso de expansión lo hizo en muchos casos, a través del sistema de leasing inmobiliario que permite a las empresa apoyarse en el sistema bancario tradicional para que sean ellos los que adquieran el predio y pagar un canon de mensual de arriendo con la posibilidad de que al final el local quede a nombre de la marca, pagando un valor de salvamento. La cuota mensual es una combinación de los costos financieros por el valor total del local, más la amortización del bien, lo cual hace que sea en muchos casos más alta que los costos de arriendo tradicionales.
Don Jediondo Sopitas y Parilla, no es ni será la única compañía en entrar en un proceso de reorganización empresarial. La fortaleza de la marca que durante 15 años estuvo presente en lo largo y ancho del país, al cariño que los colombianos le tiene a su propietario, sumado a la corrección de los aspectos administrativos que la llevaron a esta situación, le permitirá a esta empresa a salir a flote y estando seguros que “Las pechugas de mis primas”, ‘La punta de anca de mi abuelo’ seguirán siendo, los menús favoritos de la comida criolla del país.
Fuente: América Retail